El conflicto por la construcción de un canal en el río Masacre o Dajabón en territorio haitiano tomará oficialmente esta semana un ribete internacional, tras el tema ser llevado ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), por el presidente Luis Abinader.
El mandatario dominicano viajó este lunes a Nueva York para participar en la 78ª Asamblea General de la ONU, en la que pronunciará un discurso el próximo miércoles que girará sobre la crisis de Haití. El escenario será aprovechado nuevamente para tratar de sensibilizar a la comunidad internacional en procura de que vaya en auxilio de la nación más pobre de la región.
Abinader regresará al país el viernes 22, luego de agotar compromisos que incluyen reuniones bilaterales con otros mandatarios, ejecutivos y funcionarios de organismos internacionales, financieros y diplomáticos.
«Por eso es importante mi viaje de esta semana, porque la solución definitiva está allá y no aquí. El problema de Haití ya no está en Haití, está en manos de la comunidad internacional», proclamó el presidente dominicano en una alocución en la víspera de su viaje.
La exposición de la situación haitiana a nivel internacional no es nueva, pues con menos de dos meses en el poder, Abinader ya buscaba respaldo de organismos extranjeros.
El 7 de octubre del 2020, al participar en la Conferencia de Washington sobre las Américas, un evento que reúne a los líderes más importantes de los sectores públicos y privados de la región, afirmó que tenía una postura amistosa con el vecino Haití y externó sus deseos de colaborar en su recuperación, compromiso que debía ser compartido con la comunidad internacional.
Veinte y tres días después, el 30 de octubre de ese mismo 2020, el presidente dominicano hablaba de que podía convertirse en vocero en otros países para en conjunto implementar un plan de desarrollo destinado a guiar a la vecina nación hacia la prosperidad y la democracia.
En su primera intervención ante la 76 Asamblea ONU, el 21 de septiembre del 2021, solicitó con “altísima prioridad” la colaboración internacional, debido a que “no hay, ni habrá jamás una solución dominicana a la crisis de Haití”. Un día después, durante su participación en la ONU, los presidentes, dominicano, de Costa Rica y Panamá, (luego se incorporó Ecuador) conformaron la Alianza para el Desarrollo en Democracia, un espacio de diálogo y coordinación estratégica.
Desde ese escenario los dignatarios se han mantenido llamando a la comunidad internacional para atender la crisis que afecta Haití.
A ello se suma, la «Declaración de Santiago de los Caballeros», aprobada en diciembre de 2022 en la LVI Reunión de Jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), que expresó su apoyo al llamado formulado por República Dominicana a la comunidad internacional para realizar esfuerzos y buscar respuestas a la crisis de Haití.
La XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno, celebrada en el país los días 24 y 25 de marzo del presente año 2023, fue otro espacio donde uno de los temas principales fue la desestabilización de Haití y las posibles soluciones para la pacificación de esa nación.
Los países recalcaron la «profunda preocupación por el progresivo deterioro de la situación de seguridad pública y humanitaria en la República de Haití”.
También desde la Comunidad del Caribe (Caricom) las voces se han elevado en buscada de un diálogo por el vecino país. En una cumbre por el 50 aniversario del Caricom, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, insistió a la comunidad internacional en la necesidad de formar una fuerza extranjera de seguridad en Haití y solicitó «voluntarios”.