Hay muchos jugadores de las Grandes Ligas de Béisbol que nacieron para batear, y cuando la Liga Americana adoptó el bateador designado en 1973, hizo y salvó muchas carreras. Aquí están situados en la historia los dos mejores bateadores designados de la República Dominicana completando lo que son los siete mejores en la historia de Las Mayores.
A continuación ellos son lo mejor de lo mejor cuando se trata del DH, que ahora también se usa en la Liga Nacional:
Nelson Cruz
A partir de 2023, Cruz todavía se encuentra activo en una carrera que abarcó partes de tres décadas. Y, gracias al bateador designado, Cruz se ha ganado la vida en las Grandes Ligas. Al ingresar a la temporada 2023, Cruz apareció en más de 1,000 juegos como DH. El siete veces All-Star conectó más de 240 jonrones y registró más de 690 carreras impulsadas desde esa posición. En su carrera, en la que ha sido estrella para Texas, Seattle y, sobre todo, Minnesota, Cruz ha registrado más de 2.000 hits y 450 jonrones. Cruz ganó el Premio al Bateador Designado Sobresaliente con los Marineros en 2017, bateando .288 con 39 jonrones y 119 carreras impulsadas, el máximo de su carrera, y luego nuevamente como Mellizo en 2019, cuando bateó .311 con 41 jonrones y 108 carreras impulsadas.
Harold Baines
Es hora de destacar una leyenda ofensiva de los Medias Blancas de Chicago. Si bien Baines jugó más de 1,000 juegos como jardinero, pasó 1,643 como bateador designado durante su notable carrera de 22 años que llegó al Salón de la Fama, que incluyó tiempo con cinco equipos. 5.807 apariciones en el plato, donde Baines registró 1.690 hits con 236 jonrones y 981 carreras impulsadas. En 1987 y 1988, el seis veces All-Star ganó el Premio al Mejor Bateador Designado para los Medias Blancas. En general, Baines bateó. 289 y tuvo 2,866 hits con 384 jonrones para un legado como uno de los mejores bateadores del juego.
Pablo Molitor
Molitor, siete veces All-Star, fue un jugador de cuadro estelar para los Cerveceros de Milwaukee durante la década de 1970 y hasta la década de 1980. Sin embargo, Molitor continuó lo que sería una carrera del Salón de la Fama como bateador designado, principalmente para Toronto y Minnesota. Primero ganó el premio al bateador designado destacado en 1993, cuando ayudó a los Azulejos a ganar la Serie Mundial (y llevarse a casa los honores de Jugador Más Valioso de la serie al batear 22 jonrones con 111 carreras impulsadas y un promedio de bateo de .332. Tres años más tarde con los Mellizos, Molitor volvió a ganarlo después de batear .341, el máximo de su carrera, y también establecer su mejor marca personal con 113 carreras impulsadas. Bateó .308 y registró 1,457 de sus 3,319 hits mientras hacía 4,727 apariciones en el plato como bateador designado.
Hal McRae
McRae, un bateador de por vida de .290, fue tres veces All-Star y también fue nombrado el mejor bateador designado de las mayores en 1976, 1980 y 1982, todo como miembro valioso de los Reales de Kansas City. McRae ocupó el puesto de designado en 1388 juegos durante su ilustre carrera en las Grandes Ligas y registró 1526 hits, 143 jonrones y 808 carreras impulsadas. Lideró las mayores con 133 impulsadas durante la campaña de 1982. La posición de bateador designado solo solidificó a McRae como uno de los mejores bateadores del juego. Bateó .295 desde el puesto de designado y también recibió 482 bases por bolas.
Shohei Ohtani
Tal vez sea exagerado, pero existe la posibilidad de que antes de que termine la carrera de Ohtani en las Grandes Ligas, encabece esta lista. Después de todo, el tipo fue el ganador del premio al bateador designado destacado de las mayores para 2021 y 2022. La estrella bidireccional ha pasado la mayor parte de su tiempo ofensivo como bateador designado desde su debut en 2018. Al final de la campaña de 2022, Ohtani hizo 1,884 apariciones en el plato como bateador designado de Los Angeles Angels . En ese puesto de 2018-22, el Jugador Más Valioso de 2021 bateó .266 con 122 jonrones, 95 dobles, 21 triples y 328 carreras impulsadas. También caminó 242 veces y tuvo un OPS de .886. Por supuesto, todavía se mantiene fuerte como una de las estrellas más grandes del juego.
David Ortíz
En diciembre de 2002, Ortiz fue liberado por Minnesota, luego de un mandato de bajo rendimiento que abarcó partes de sus primeras seis temporadas en las Grandes Ligas. Ortiz luego se unió a los Medias Rojas de Boston, y el resto fue historia, del tipo del Salón de la Fama. Hay quienes argumentarán que “Big Papi” es el mejor DH de todos los tiempos, y con razón. El 10 veces All-Star y tres veces campeón de la Serie Mundial ha ganado un récord de ocho premios al bateador designado destacado. Mientras hacía 8,861 apariciones en el plato como bateador designado, Ortiz conectó 485 de sus 541 jonrones, impulsó 1,569 carreras, bateó .289, tuvo un slugging de .559 y registró un OPS de .942. Es un desechado, que se convirtió en un ícono, y luego en una leyenda.
Édgar Martínez
Martínez fue un bateador designado tan consistentemente bueno que el Premio al Bateador Designado Sobresaliente de la MLB (que ganó cinco veces) recibió su nombre cerca del final de su última temporada en 2004. Martínez, quien pasó toda su carrera de 18 años con los Marineros de Seattle , pasó 1,403 de los 2,055 juegos que jugó como DH. Según STATS Perform, de aquellos jugadores cuya posición principal se considera bateador designado, Martínez ocupa el primer lugar en la historia de la MLB en promedio de bateo (.312), segundo en OBP (.419), cuarto en slugging (.552). Martínez, siete veces All-Star y dos veces campeón de bateo (1992, 1995), ingresó al Salón de la Fama en 2019.
¿Y tú, cambiarías el orden e que fueron nombrados? Seguro que culminaríamos con un debate clásico de los versus en los deportes: Martínez vs Ortíz. Y el mismo siempre es un deleite con las grandes consideraciones que ambos merecen, para orgullo de los latinos.